Julio, eran vacaciones y ya venía de una tragedia de ese momento una relación conmigo mismo, necesitaba desahogarme de este mar lleno de mentiras propias y allí estaba, la salida, lo miré...
Todo empezó a ir muy bien, la plática fue creciendo y entre nuestros ojos empezamos a sentir la sensación del llamado enamoramiento y fue así como comenzó está aventura, él y yo felicidad.
Cada vez nuestra relación emitía un frecuencia muy alta, cada paso atrás florecía y cada paso nuevo era una sensación de satisfacción, estaba en su mundo, no sabía cuál era mi anterior problema, lo que sabía que él dormia junto a mí y yo estaba bien con eso, realmente esa tranquilidad enorme que sientes en ti, como si no te faltará nada, como si todo debiera estar dónde está, es la sensación de perfección cuando sientes ese cuerpo semidesnudo bajo las sábanas blancas que está apegado a ti con una cara dormilona, la sensación de felicidad está allí, es efímera no lo sé. Lo que si debes saber es que no te debes de preocupar, solo vive el momento que ese sí es efímero.
Y los gestos románticos se me hacen notar, se que es cursi pero quiero escribirle canciones y así será.
—Toma aquí están tus flores amarillas.
—Son las 7:00AM pero abrázame y sigamos durmiendo.
—Que haces viendo mi galería?
—Bueno sí, amo tomar fotos cuando estás distraído.
—Mi teléfono está lleno de tus fotos.
—Paseamos en caballo?
—Es una cámara, se que amas la fotografía.
—Sabes no me gusta la playa para nada, pero por ti, lo que sea
—Y dime qué se supone que hacemos en medio del mar?
—Mirame a los ojos y déjame ver los tuyos
—Veo en tu ojos, la felicidad.
No dices ni una palabra, te sientes bien?
Lo miré... Pero llegó mi mejor amiga y quite la mirada, solo seguimos viendo el evento frente a nuestros ojos
“Si felicidad es efímera? no lo sé, lo que si debes saber es que no te debes de preocupar, solo vive el momento que ese sí es efimero.”
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